Un detalle: rebajaron la dureza de este color con el papel pintado efecto saco. De hecho, "es una estancia que nos encanta. Es una cocina abierta, muy bien integrada al comedor, con una isla muy práctica que divide ambas estancias. Los electrodomésticos están integrados y no hay campana visible, algo importante porque la cocina se vea desde el salón", indica Laia.