Los detalles cuidadosamente dibujados de las delicadas flores y hojas estilizadas cobran fuerza en el fondo blanco crema liso de este papel pintado tejido no tejido. Al mismo tiempo, el fondo claro permite que los tonos vibrantes (rojo frambuesa, amarillo oro, varios tonos de azul y verde pátina) pasen a primer plano. Las flores, que recuerdan a la ornamentación oriental, convierten cualquier espacio en un oasis de alegría y luminosidad.