Hombre perro, hombre bravo, hinca tu rodilla y pon tu barba contra el suelo porque antes de que tu nacieras nació el hijo de DIOS. Hambre tenía y de comer me dio. Invoco a San Marcos de león para que amanse de pies, manos y corazón a (nombre de él-ella) así como amansó al león y a las otras fieras del monte. Yo te conjuro, vena por vena, nervio por nervio, conjurándote te reduzco a mi (tu nombre) no podrás estar con mujer-hombre alguna-o, y si fueras a estar, tus fuerzas (el nombre de el-ella) te han de faltar. Solo conmigo podrás estar. Así sea. Hacer la oración tres días seguidos, nueve si es muy difícil la petición. Se enciende una vela blanca el primer día y una roja el último.