Cuando se está acostumbrado a vivir en un piso de entre 80 y 100 m² cualquier vivienda del tamaño del dúplex que os enseño hoy, 340 m², parece algo increíblemente grande para uno mismo. En lugar de disfrutar de cada detalle y quedarse con muchas ideas para nuestra versión mini, solemos verles muchas pegas, casi todo relacionado con el exceso de espacio o lo caro que puede resultar el mantenimiento y todo eso es cierto, pero vaya, soñar es gratis ¿no? y desde luego en este ático hay muchos rincones donde mirar y perderse. A pesar del abundante espacio que podría hacer la vivienda fría, la tanto la gama cromática elegida como las texturas y los materiales hacen la decoración muy cálida y acogedora. A destacar especialmente el suelo de madera y el encofrado del techo, espectacular.